
Más de la mitad de las madres de familia numerosa (56%) se han sentido discriminadas o penalizadas en algún momento de su vida por tener más hijos y el 51% cree que esta circunstancia -tener más hijos– ha dificultado su acceso al empleo. Así lo releva una encuesta a casi 800 madres de familia numerosa, realizada por la Federación Española de Familias Numerosas (FEFN) para conocer cómo viven la maternidad y qué dificultades y necesidades tienen estas madres.
Con motivo del Día de la Madre, que se celebra el próximo domingo, la FEFN quiere poner en valor la maternidad y reclamar un mayor reconocimiento social que se traduzca en un apoyo real a las familias, en este caso centrado en las madres, que son las que sufren más la discriminación social y laboral por razón de hijos y las que asumen más las tareas de cuidado de los hijos y el hogar. “Las madres hacen una aportación fundamental a la sociedad y no pueden pagar por ello un precio alto en forma de pérdida de oportunidades, exceso de trabajo y carga mental por no poder llegar a todo”, destaca la vicepresidenta de la FEFN, Encarni Álvarez.
Y es que la encuesta, realizada a 759 mujeres a partir de 2 hijos, constata la escasa valoración o reconocimiento social que, a ojos de las propias mujeres, tiene la maternidad, según afirma el 86% de las madres: un 47% de ellas considera que la sociedad valora la maternidad “muy poco” y un 39% cree que “nada, en absoluto”. También refleja la carga de trabajo que asumen en el cuidado de los hijos y la familia, sus dificultades para llegar a todo y los condicionantes que tienen, de tiempo y dinero, a la hora de poder compaginar trabajo y familia.
Factor económico
Según la muestra recogida por la FEFN, la mayoría de las madres de familia numerosa trabaja fuera de casa (79%), el 29% reconoce que lo hace por una cuestión económica, ya que “necesitamos contar con dos sueldos para cubrir todas las necesidades”, aunque la mayoría, un 49%, apunta a un doble motivo: lo económico y porque “no me planteo no desarrollar una actividad profesional”. De la misma forma, muchas mujeres, (40%) aseguran que disfrutan mucho con sus hijos, pero “no dejaría de trabajar fuera de casa, prefiero compaginar trabajo y familia”, mientras el 43% asegura que se quedarían en casa para poder cuidar personalmente a sus hijos y dedicarles más tiempo, pero saben que “es inviable por razones económicas”.
Más trabajo en el día a día
Del total de madres que trabajan fuera de casa, un 59% lo hace a tiempo completo y un 20%, a media jornada, con un horario más compatible con las necesidades familiares, que son muchas en las familias con hijos y que recaen más en las mujeres, según su propia opinión: 3 de cada 4 madres (76%) tiene claro que son ellas las que asumen más trabajo en el día a día en el cuidado de los hijos y el hogar, aunque la mitad de las madres (51%) reconoce que en las familias numerosas hay un reparto más equitativo.
Dentro de todo el trabajo, el mayor reto diario de las madres de familia numerosa es la “logística familiar: compra, comidas, lavadoras, tutorías, pediatras…”, según afirma el 38%; seguido de la conciliación, una cuestión complicada para el 22% de las madres que aseguran que “trabajando fuera de casa, cuesta compaginar los horarios laborales con la familia”.
Apoyo económico y conciliación
La encuesta deja claro que lo económico y la conciliación son las dos cuestiones más necesarias para las familias y, en concreto, para las madres. Un 51% reclama ayudas directas “para poder afrontar las necesidades de conciliación con soluciones a la medida de cada uno” y un 39%, “medidas de conciliación reales, al alcance de todos, como los permisos retribuidos”.
La FEFN insiste también en ello, recordado que es necesario un mayor reconocimiento a la maternidad con medidas concretas, algunas encima de la mesa desde hace años, como “la prestación universal por hijo a cargo o los permisos retribuidos, que, si no llevan aparejada la retribución, no son una opción para la mayoría de familias, ya que un porcentaje muy alto no puede permitirse el lujo de perder ingresos, como se ve claramente en la encuesta”, explica la vicepresidenta.
Encarni Álvarez destaca que “los hijos son un activo para la sociedad, las mujeres que deciden ser madres están aportando con ello un bien para toda la sociedad y deben tener las mismas oportunidades que el resto. Deben ser compensadas por lo que la maternidad implica teniendo en cuenta la aportación social que están haciendo en forma de capital humano y por las labores de cuidados de personas dependientes (menores y mayores) que, mayoritamente asumen ellas”.